domingo, 9 de enero de 2011

Para atraer al ser amado

Llegó el nuevo año y más de una mujer me comentó su interés para hacer algún ritual que le garantice atraer (esta vez sí) al ser amado, algunas buscaron en internet otras en los infaltables programas de magazine que hay en la televisión; otras pocas me comentaron que este año no harían nada pues siempre lo hacían y nada pasaba. Creo que aún estoy a tiempo de dar algunos tips a mis amigas, algo más efectivos para atraer al ser amado.
Para empezar háganse una autoevaluación lo más objetivamente posible, evalúen tres aspectos básicos que a los hombres nos resultan bastante atractivos:
La estética, no se trata simplemente de una cara bonita o un cuerpo bien proporcionado, se trata de que tanto cultives lo mucho o poco que  tienes, hermosas curvas se deslucen cuando hay exagerada flacidez y abundante celulitis, el cuerpo puede ser formado con ejercicios; si bien no tienes mucha cadera, puedes aumentar el volumen de tus piernas y darte un aspecto más proporcionado, puede elegir un mejor maquillaje para resaltar mejor tus facciones, elegir adecuadamente la ropa que usas. Cuida la ropa que usas, combina adecuadamente cada prenda, si estas gorda, no uses polos ceñidos, menos aún pantalones que te queden demasiado ajustados, pero concéntrate en bajar todo lo que puedas de peso, no te resignes, si no hay problema hormonal de por medio, entonces puedes bajar de peso con algo de esfuerzo (dieta y ejercicios). En internet existen cientos de páginas donde puedes encontrar consejos útiles sobre el tema de la ropa, aquí tienes un par:
Pero no olvidemos que el ejercicio es fundamental, no sólo por la cuestión estética, la mejora en tu salud será inmensa si practicas deporte a diario, mejorarás tu sistema inmunológico, mejorarás tu carácter por la secreción de endorfinas, es un aspecto que no debes descuidar, matricúlate en un buen gimnasio o inscríbete en algún taller deportivo que te atraiga.
La sensualidad, este es tal vez el rasgo más impactante de una mujer, más de una vez me he cruzado con una mujer cuyo cuerpo no era voluptuoso, no tenía una figura impactante, pero el porte, la elegancia de su andar, la ropa que llevaba puesta y cierta gracia algo difícil de  explicar me hizo seguirla buen rato con la mirada. La sensualidad de una mujer radica en sus gestos, sus movimientos y su mirada, el resto es complementario. Cinco puntos a tener en cuenta: Primero la postura, siempre recta, jamás encorvada, los hombros hacia atrás, orgullosa de sí misma. Segundo el modo de caminar, elegante y sinuoso con un vaivén suave. Tercero los gestos, en especial los que haces con las manos y sobre todo con los labios. Cuarto el cabello, debe estar sedoso y brillante. Quinto la mirada, traviesa, retadora y expresiva. El momento en el que se despliega plenamente la sensualidad de la mujer es en el baile, así que es algo a tener presente. Recuerda que la sensualidad no es vulgaridad, no necesitas enseñar mucho, incluso no necesitas enseñar nada, no se trata de cuanta carne muestras, se trata de un estilo, prácticamente una forma de vivir, por ello debe ser natural, si no lo es, practicarlo tanto que se vuelva parte de tu naturaleza; la sensualidad es suave y discreta, se trata de dejar en el observador las ganas de pedir más y más, no dárselo todo de sopetón.
La simpatía, se trata de la capacidad de caerle bien a las personas, de que adoren estar a tu lado, eso implica que tan risueña eres y que tan tolerante, que tanto sabes escuchar y mantener una conversación interesante con los demás, que tanto aguanta las bromas y como las maneja, las opiniones que vierte y como lo hace, así como su alegría y capacidad de animar a los demás. Otra vez es un estilo de vida más que algo que se pueda aprender de un manual.
Pero, ¿dónde queda la inteligencia?, pues es cada una de estas variables, la inteligencia está definida como la capacidad de resolver problemas, por tanto estará presente en cada uno de estos elementos, al elegir la ropa y el maquillaje, al mirar con el grado adecuado de seducción a un hombre, al expresar tu opinión sobre un tema o dar un consejo, al pedir ayuda y consejo a las personas adecuadas para mejorar tu imagen.
Y ¿qué hay de los buenos sentimientos, el amor, tu “interior”? Pues son innegablemente importantes, lamentablemente los hombres no poseemos poderes telepáticos para leer mentes ajenas y saber lo que las personas piensan o sienten, les guste o no a la mayoría de hombres los impacta más lo visual, más que lo que nos puedan decir, eso no quiere decir que no valoremos lo demás, pero es precisamente lo visual lo que nos despierta el interés por conocer el resto.